Muchos niños con sordera pueden tener dificultades para comprender y utilizar el lenguaje, oral o señado, de manera efectiva; lo que puede afectar su capacidad para aprender y desarrollarse. En Nuestro equipo comprende lo importante de brindar la atención adecuada y personalizada a cada niño para ayudarlo a desarrollarse plenamente.
Los niños sordos pueden tener problemas para regular emociones, manejar la frustración y lidiar con la soledad debido a su entorno. Las terapias conductuales les enseñan habilidades para superar estos desafíos y desarrollar habilidades sociales, fundamentales para su éxito en la vida diaria.